viernes, 15 de junio de 2012

video sobre la ucv

Reseña historica de la ucv


La historia de la Universidad Central de Venezuela se inicia con la fundación del Colegio Santa Rosa de Lima por Antonio González de Acuña en 1673, el cual fue inaugurado el 29 de agosto de 1696 por Diego Baños Sotomayor. Irónicamente, en la capilla del seminario se declaró la Independencia de Venezuela el 5 de Julio de 1811, y fue en esa misma institución donde se formaron muchos de los redactores y firmantes del acta. Actualmente este recinto sirve de Palacio Municipal de Caracas.

El 22 de Diciembre de 1721, tras múltiples gestiones por parte de los venezolanos, el Rey Felipe V concedió facultad al Seminario de otorgar grados mediante la Real Cédula y el 18 de Diciembre de 1722 el Papa Inocencio XIII le otorgó carácter de Pontificia. Inicialmente se impartieron clases de teología, medicina, filosofía y derecho, todas ellas en latín, pero eventualmente el régimen académico se independizó del seminario y el 11 de Agosto de 1725, el Obispo de Caracas Juan José de Escalona y Calatayud (quién había gestionado la creación del instituto), instala el Real y Pontificio Seminario Universidad Santa Rosa de Lima de Santiago de León del Valle Caracas. Su primer rector fue el presbítero Francisco Martínez de Porras y hasta 1810, fecha en que el Seminario de San Buenaventura de Mérida fue elevado a Universidad (actual Universidad de Los Andes), la de Caracas fue la única del país. La Universidad se denominaba Real y Pontificia, por estar bajo la tutela y protección del Monarca y del Sumo Pontífice. Para ser admitido como alumno de la universidad se requería presentar un testimonio de “vista et moribus”, es decir, una relación detallada de “vida y buenas costumbres”.

A finales del siglo XVIII, la Universidad de Caracas comienza a “vestirse de moderna”, gracias al rector Baltasar de los Reyes Marreros quien inicia la enseñanza de la filosofía racionalista de Locke, Newton, Leibnitz, Descartes y otros filósofos, lo que concluyó con el rechazo de los postulados de las obras de Aristóteles, Santo Tomás, Justiniano e Hipócatres, y convirtiéndose en semillero de la Independencia. En consecuencia, entre 1814 y 1821, las autoridades españolas de la universidad, prohibieron la enseñanza de corrientes modernas de pensamiento y desataron una persecución contra los simpatizantes de la independencia. Con la derrota de España en la Guerra de Independencia, la universidad pasó de Real a Republicana y se inició su primera modernización académica e institucional.

Obras de arte Edificio de la Biblioteca (II): Vitral de Fernand Léger

En el hall de acceso de la Biblioteca Central se encuentra una de las obras más conocidas de todo el campus: el vitral de Fernand Léger. Una de las cosas que más llama a atención de este vitral (además de su altura) es su colorido. La luz del exterior permite que los colores del vitral se reflejen en la sala, especialmente en el piso, dándole otra dimensión a esta obra

Nombre de la Obra: vitral

Año: 1954

Tipo: Vitral

Autor: Fernand Leger

Material: Estructura de concreto y vidrio

Dimensiones: 630 x 1237 cm
Ubicación: Edificio de la Biblioteca Central, hall principal 

Obras de arte Sala de Conciertos (IV)Mural de Mateo Manaure


Un mural de Mateo Manaure cubre la fachada este del edificio de la Sala de Conciertos.


Nombre de la Obra: mural de  mateo

Año: 1954

Tipo: Mural

Autor: Mateo Manaure

Material: Cerámica esmaltada

Dimensiones: 640×1465 cm
Ubicación: Edificio de la Sala de Conciertos, fachada este 

Mural de Mateo Manaure

 
Paralelo a la obra “Positivo – Negativo” de Victor Vasarely se encuentra un mural abstracto-geométrico de Mateo Manaure, en el que se complementan perfectamente los colores azul, negro, rojo y blanco.










Nombre de la Obra: mural de mateo

Año: 1954

Tipo: Mural

AutorMateo Manaure

Material: Mosaicos vítreos industriales de 2 x 2 cm

Dimensiones: 288×1570 cm

Ubicación: Corredor cubierto, a un lado de la entrada a la Biblioteca Central 

Pascula Navarro

En 1923 nace el 17 de mayo en Caracas. El primero de dos hermanos, Pascual y Carlos, hijos de Enrique Navarro y de Cruz Velásquez.
En 1927 Enrique Navarro abandona a Cruz y a los dos niños y contrae matrimonio con Esperanza Acosta de cuya unión nacen Enrique, Manuel y Mercedes Navarro Acosta. Cruz y sus hijos encuentran refugio en la casa de la "tía Paquita", Francisca Velásquez, hermana de Cruz.
En 1929 estudia en la escuela familiar de las hermanas Ollares.
En 1933 Pascual culmina en 4to. Grado de instrucción primaria en la escuela "J. M. Echandía".
En 1934 concurre a la Academia de Bellas Artes donde asiste a la cátedra de escultura del Prof. Lorenzo Gonzáles.
En 1936 muere Cruz Velásquez. La "tía Paquita" se hace cargo de los niños.
Según la resolución oficial, la Escuela de Artes Plásticas es separada de la Academia de Bellas Artes.
En 1939 conoce al pintor Armando Reverón, quien influirá profundamente en su vida y en su conducta social.
Alejandro Otero ingresa como alumno de la Escuela de Artes Plásticas.
En 1940 obtiene una de las becas creadas por iniciativa del maestro Antonio Edmundo Mosanto, director de la Escuela, como estímulo y soporte económico para los alumnos sobresalientes. El monto de dichas becas era de cien bolívares mensuales.
En 1941 participa en el II Salón Oficial Anual de Arte Venezolano en la sección de Alumnos de la Escuela de Artes Plásticas.
En 1942 expone cinco pinturas y dos grabados en la Sección de Alumnos correspondiente al III Salón Oficial.
En 1943 participa en la sección de Alumnos de IV Salón Oficial. Carlos González Bogen, su condiscípulo, presenta un retrato de yeso de Pascual y Alejandro Otero un óleo, Estudio para un retrato de Pascual Navarro.
En 1944 con las obras Quebrada, Arboles y Boceto, ésta última reproducida en el No. 42 de la Revista Nacional de Cultura, obtiene el Premio para Trabajos de Mérito Especial en la Sección de Alumnos en el V Salón Oficial. Pascual es atendido siquiátricamente por el Dr. Ramos Calles.
En 1945 Pascual Navarro, Alejandro Otero, Mateo Manaure y otros rehusan participar en la propuesta encabezada por Perán Erminy, Enrique Sardá, Celso Pérez y otros alumnos en contra del maestro Antonio Edmundo Mosanto y demás profesores de la escuela de Artes Pláticas. Sufre una crisis nerviosa y desaparece de su casa. Días más tarde es localizado y sometido a tratamiento bajo la atención del Dr. Hernán Quijada. A fin de recaudar fondos en su ayuda, sus amigos organizan una exposición en el Instituto Cultural Venezolano- Británico con pinturas, gráficas y cerámicas tanto de sus condiscípulos como de sus profesores. Este mismo año egresa de la Escuela de Artes Plásticas y se instala durante algún en el castillete de Armando Reverón, en Macuto, a fin de trabajar directamente con el maestro. Inicia la serie de sus "nocturnos". Participa con tres obras en el III Salón Arturo Michelena del Ateneo de Valencia. Publica en El Nacional los artículos "Arte si... pero sin dogmas" y "El Diego Rivera que yo conozco" (2 y 23 de diciembre, respectivamente) a fin de refutar la posición de Gilberto Atoínez y otros partidarios de un arte de exclusiva intención social.
En 1946 abre su primera exposición individual en la librería La Francia de Caracas. El Instituto Cultural Venezolano- Británico le invita a dictar una conferencia sobre la pintura inglesa. El 27 de marzo publica en El Nacional "César Prieto en el Museo. Un artista del paisaje". Obtiene el premio "Andrés Pérez Mujica" en el IV Salón Arturo Michelena donde participa con tres paisajes Cabo Blanco, Guanape, El Cantón y algunos dibujos. Pinta su célebre Muchacha con abanico conocida más tarde como la Dama del abanico, retrato de Carmen Josefina Calcaño, una gouache sobre papel ejecutada en un estilo deliberadamente rememorativo de Eduard Manet.
En 1947, el 26 de enero publica en El Nacional y bajo el título de El solitario de Macuto, un enjundioso estudio sobre la obra y personalidad de Armando Reverón. Concurre al VIII Salón Oficial con Muchacha con Abanico, más tres pasteles y, en la Sección de Dibujo, con otras dos obras. En su primera entrega, el Premio Nacional de Artes Plásticas se decide entre Pascual Navarro y Mateo Manaure, quien resulta favorecido. Pascual obtiene el premio "Federico Brandt" por su Muchacha con abanico y una beca para estudiar en París, otorgada especialmente por el Gobernador del Distrito Federal. El 1 de junio Navarro y Manaure exponen conjuntamente en el Museo de Bellas Artes cuyo catálogo lleva un texto de Carmen Josefina Calacaño. La muchacha con abanico aparece catalogada como la dama del abanico. El 18 de este mes, ambos artistas embarcan con destino a Francia.
En 1948 en París se interesa en las subastas de arte; colecciona pinturas, grabados antiguos y modernos, muñecas, máscaras africanas y objetos antiguos. Visita a Inglaterra y Bélgica y participa en el Salón de Mayo. A Caracas envía obras del I Salón Planchart y al Salón Anual del Centro Venezolano- Soviético. El 9 de julio abre sus puertas el Taller Libre de Arte de Caracas, centro de vanguardia artística venezolana.
En 1949 participa con doce obras en el X Salón Oficial Venezolano donde obtiene el Premio "Antonio Esteban Frías". Envía La griega y Composición al II Salón Planchart y participa en la I Exposición de Artistas Latinoamericanos en París en la Casa de América Latina, junto con Mateo Manaure, Héctor Poleo y Armando Barrios. Imprime una edición de 15 carpetas de siete litografías cada una, una de las cuales es un rostro en azul ultramar y otra fechada en 1948, impresas sobre papel artesanal de diversas texturas. El No. 5 de la revista Contrapunto de Caracas reproduce su artículo "El solitario de Macuto" ilustrado con tres obras de Armando Reverón y la caricatura del maestro publicado originalmente en El Nacional, en 1947. Dicha caricatura fue realizada por Manuel Antonio Salvatierra (MAS).
Ramón Martín Dubán obtiene el Premio oficial de pintura en X Salón Oficial por su cuadro retrato de Pascual Navarro.
En 1950 recibe un Accésit al Premio Nacional de Artes Plásticas por sus cuatro obras expuestas en el XI Salón Oficial de Caracas. En París de la casa Aimée Battistini en la Rue Tretaigne, centro de convergencia de los artistas jóvenes venezolanos. Participa en el Salón de Otoño; viaja por España e Italia y comienza a indagar en el expresionismo abstracto. Integra con Alejandro Otero, Mateo Manaure, Luis Guevara Moreno, Carlos González Bogen, Narciso Debourg, Perán Herminy, Rubén Núñez, Dora Hersen, Aimée Battistini, J. R. Guillent Pérez y Belén Núñez, el grupo promotor de la revista Los Disidentes, cuyo primer número lleva fecha de marzo de 1950. "Anacronismo e irresponsabilidad" publicado, en el No. 2 y "Los disidentes y sus críticos", en el No. 5 y último de la revista, aparecen rubricados por Pascual Navarro. El No. 2 de la revista Taller, órgano del Taller Libre de Arte de Caracas, publica una breve reseña de la actividad de los venezolanos en París, ilustrada con dos obras de Navarro y otras de Manaure y de González Bogen.
En 1951 envía cuatro gouaches abstractos al XII Salón Oficial. Rafael Lozano, en el No. 85 de la Revista Nacional de Cultura, cuestiona la "sinceridad" de las obras presentadas por el artista. En París asiste al Taller de Arte Abstracto dirigido por Jean Dewasne y Edgard Pillet y se vincula con Víctor Vasarely, Hans Hartung, August Herbin, André Bloc y otros maestros contemporáneos. Concurre al VI Salón de Realités Nouvelles, en cuyos eventos participará hasta 1954. Deja de recibir la beca que se le había prorrogado hasta este año.
En 1952 es incluido en la I Muestra Internacional de Arte Abstracto a propósito de la apertura de la galería "Cuatro Muros", fundada en Caracas por Mateo Manaure y Carlos González Bogen. Participa en el Salón de Mayo y, conjuntamente con el alemán Horst kalinowsky y el cubano Wilfredo Arcay, expone en la Galería Arnaud de París. La revista Art d'aujourd'hui "selecciona un grupo de jóvenes pintores interrogándoles cómo ocurrió su paso al abstraccionismo". Kalinowsky, Arcay, la pintora ecuatoriana Aracellis Gilbert y Pascual Navarro, son los artistas entrevistados. Asiste a los cursos libres de filosofía en el College d'France dictados por Maurice Merlau-Ponty, existencialista sartreano y, con cierta frecuencia, a la academia Le Grand-Chaumiére. Es incluido en la exposición de las Nuevas Generaciones de Pintores Venezolanos abierta en el Taller Libre de Arte de Caracas y con cuya panorámica llegaba a su fin el Período Radiante de la actividad artística de dicho centro.
En 1953 participa en el XIV Salón Oficial con tres obras abstractas y, por encargo del arquitecto Carlos Raúl Villanueva, diseña tres grandes murales para la Plaza Cubierta de la Ciudad Universitaria de Caracas. En el XI Salón Arturo Michelena de Valencia, obtiene el Premio para dibujo "Emilio Boggio". Figura con Alberto Magnelli, Fernand Léger, Víctor Vasarely, Jean Arp, August Herbin, Serge Poliakoff, Jean Dewasne, Maurice Estéve y otros en tres diferentes colectivas en las galerías Denís René, Suzanne Michel y Cimaises, impulsoras del arte abstracto en París. Abandona definitivamente la abstracción geométrica y retorna a la figuración.
En 1954 participa en la exposición presentada en el Museo de Arte Moderno de París a fin de dar a conocer el Proyecto de Integración de las Artes concebido por Carlos Raúl Villanueva para la Ciudad Universitaria de Caracas. Expone así mismo en el Salón de Mayo. El No. 102 de la Revista Nacional de Cultura, Gastón Diehl publica "Estampas de Venezuela. Pintura venezolana de hoy y mañana", en la cual trata sobre la personalidad artística de Navarro quien participa con seis obras en el XII Salón Arturo Michelena de Valencia.
En 1955 expone en el Salón Oficial tres obras abstractas, entre ellas el proyecto para el mural de la Sala de Conciertos de la Ciudad Universitaria. Obtiene el Primer Premio para pintor venezolano en la Exposición Nacional de Pintura organizada por el Ateneo de Valencia. El Primer Premio para pintor extranjero fue adjudicado a Alfred Manessier. El No. 160 de la Revista el Farol, de Caracas, reproduce ambas obras a todo color: Otoño de Navarro y L'Eveille du printemps de Manessier. Es incluido en la enciclopedia Pintores Célebres de la colección "Grandes Figuras de la Humanidad" de la Central Peruana de Publicaciones. Se estima que por esta fecha participa en una colectiva en la Casa de América Latina de París, en la Casa de las Américas, de Madrid y en la III Bienal de Arte Hispano-Americano, en Barcelona, España.
En 1956 expone individualmente en la Galería Clan, de Madrid. Tres de sus obras figuran en la I Exposición Internacional de Artes Plásticas Contemporáneas organizada por el Museo de Bellas Artes de París con la participación de 41 países. Navarro, Otero, Manaure, Guevara Moreno, Vásquez Brito y otros figuran en la muestra de Pintura Figurativa de los Pintores Abstractos organizada por la Galería Lauro de Caracas. Participa con varias obras en el XIV Salón Arturo Michelena.
En 1957 obtiene el 2do. Premio en el IX Salón Planchart de Caracas, con una gouache fechada en 1955.
Michel Seuphor lo incluye en el Dictionnaire de la Peinture Abstraite editado por Hazan, de París, con sendas traducciones al inglés y al español.

Ciudad Universitaria de Caracas

La Ciudad Universitaria de Caracas es el principal complejo universitario en el país. Este magnifico conjunto arquitectónico, fue diseñado y construido por el arquitecto venezolano Carlos Raúl Villanueva entre las décadas de 1940 y 1970.
Pasillo CUC



Cada espacio del conjunto fue ideado como una unidad autónoma, y la estructura en su visión macro fue realizada de manera diferente en cada caso, haciendo muy visible a su vez la grandeza de las edificaciones en relación a su espacio físico. Un sistema único de contraste entre luminosidad, estructuras, murales y esculturas hizo que Villanueva lograra una construcción que genera en los visitantes y ucevistas una percepción de grandeza y tranquilidad simultáneamente.

La Ciudad Universitaria es considerada una de las grandes creaciones de la arquitectura mundial del siglo XX, ejemplo urbanístico y artístico, no solo en Venezuela sino en Latinoamérica y el mundo. En el año 2000 fue nombrada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, convirtiéndose en el primer campus en América Latina en recibir ese honor.